Siempre y cuando un adicto sigua tomando la droga a la que está acostumbrado, por lo general puede prevenir la aparición de la depresión. Pero deja que ellos decidan volverse sobrios y dejen de consumir drogas o alcohol, y la mayoría de las personas pueden esperar ser golpeadas por una depresión grave. Por un lado las drogas o el alcohol son sustancias químicas fuertes que abruman el propio equilibrio químico innato del cuerpo. Cuando las drogas se toman de forma repetida o continuada, las funciones del cuerpo que crean los productos químicos naturales como respuesta a las actividades placenteras, se bloquean. Después de todo, los productos químicos fuertes que se encuentran en la heroína, en la cocaína, en la marihuana, en el alcohol o en otras drogas, son considerados como superiores a los que ocurren de forma natural en el cuerpo.

Después de varios días, semanas o meses de abuso de sustancias, el cuerpo depende completamente de las sustancias extrañas que se consumen. Siempre y cuando se tomen de manera consistente, el consumidor de drogas en realidad no se dará cuenta de que ha perdido su equilibrio químico natural. Pero cuando se trata de dejar de consumir la droga – es una historia diferente.

La depresión severa es un síntoma típico de la retirada de varias drogas:

• Las benzodiacepinas
• La cocaína y el crack
• Marihuana
• Alcohol
• Las anfetaminas / metanfetaminas
• Los opiáceos como la morfina, la codeína, Oxycontin, Dilaudid, Vicodin, la metadona

Uno de los servicios más valiosos que se le puede proporcionar al adicto en recuperación, es el alivio de la depresión. Sin un poco de alivio, algunos adictos en recuperación pueden tratar de escapar de la depresión y de las ansias que les golpean durante la retirada mediante volver al consumo de drogas.

• Ref.: Abuso de opiáceos y tratamiento de la adicción
• Ref.: Desintoxicación de los internos que son químicamente drogodependientes
• Ref.: Abstinencia de alcohol
• Ref.: NIDA: Información acerca de la marihuana
• Ref.: Abstinencia de la cocaína
• Ref.: Síndrome de abstinencia de las benzodiacepinas

Algunos programas de recuperación de drogas afirman que esta depresión que ocurre en ese momento es una condición “co-existente”. También es conocido como un “diagnóstico dual” – la persona es diagnosticada con ambos, la adicción y la depresión. Muchos de los programas convencionales de rehabilitación de drogas prescriben medicamentos destinados a aliviar la depresión. Hay una larga lista de estos medicamentos (drogas) disponibles. Pero el problema es que muchos de ellos son en sí mismos adictivos y que todos ellos tienen efectos secundarios desagradables.

Ciertamente, es posible que algunas personas puedan haber experimentado depresión antes de convertirse en adictos, pero como la depresión es un síntoma conocido de la retirada, tiene mucho más sentido el hacer que una persona pase a través de una retirada saludable antes de pensar en cualesquiera otros medicamentos.

La nutrición es una parte esencial del programa Narconon

Durante décadas, los expertos en nutrición han afirmado que ciertas deficiencias nutricionales pueden contribuir a la depresión. Por lo tanto, tan pronto como un adicto en recuperación llega a un centro Narconon para comenzar a retirarse de la droga que está tomando, se le suministra abundantes suplementos nutricionales repetidamente a lo largo de sus horas de vigilia. La administración de suplementos de vitaminas del complejo B, vitamina C, calcio y magnesio, ayuda de forma particular a cada persona a pasar a través de la retirada.

Por supuesto, se proporciona mucha más ayuda durante la retirada aparte de la nutrición. Aquellos que pasan por la retirada se mantienen ocupados con la interacción con el personal en forma de ayuda física y ejercicios suaves de re-orientación, que ayudan a cada persona a relajarse y dejar muy atrás las malas experiencias de la adicción. La práctica ligera de las habilidades de comunicación ayudan a cada persona a comenzar a relacionarse con la gente que está a su alrededor, en vez de pensar constantemente acerca de la angustia del pasado o de temores sobre el futuro.

Para cuando una persona ha pasado de forma estable a través de la retirada y está lista para iniciar el proceso real de construcción de una vida libre de drogas, es habitual que los adictos en recuperación en el programa de recuperación de drogas Narconon tengan perspectivas más brillantes y positivas de sus posibilidades de recuperarse.

A medida que el programa Narconon avanza para cada persona, ella descubrirá nuevas formas de construir una vida libre de drogas, a las que se puede dedicar después de la graduación. Hay un programa de desintoxicación muy completo que utiliza más nutrición, ejercicio moderado y pasar un tiempo en una sauna a baja temperatura, para sacar del cuerpo los residuos de drogas. Una vez que estos residuos tóxicos han sido eliminados, es muy común que los adictos en recuperación logren tener una perspectiva brillante sobre la vida y una mayor habilidad para pensar con claridad.

También hay en el programa un segmento muy completo de asesoramiento que permite a cada persona en recuperación el recuperar su capacidad de percibir el entorno como lo hizo una vez, sin la neblina de las drogas. Este asesoramiento ayuda a cada persona a dejar atrás la mentalidad adictiva y a prepararse para la reparación de las relaciones y comenzar a establecer metas para un futuro sobrio.

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Cursos de habilidades para la vida y aplicación práctica, guían a cada persona a través de la restauración de las relaciones familiares y el retorno a la integridad personal. Puede que estos procesos no sean las tareas más fáciles en el mundo a las que hacer frente, pero cada persona tiene a su alrededor a miembros del personal que saben lo que es ir a través de esta recuperación, y que están dispuestos a ayudarle en cada paso del camino.

El programa de rehabilitación Narconon se completa con la instrucción en un código moral de sentido común que le da una mayor estabilidad, especialmente en situaciones difíciles que puedan surgir en el futuro.

Para cuando una persona ha completado todas estas fases de la recuperación, él o ella pueden ponerse en pie, erguidos y orgullosos, listos para volver a la vida como individuos productivos. Cuando uno tiene en mente objetivos que conseguir, tiene amigos y familiares que le aceptan de nuevo y tiene la autoestima de saber que ha vencido su adicción…, es muy difícil sufrir de algo que no sea una emoción demasiado grande y el deseo de salir ahí afuera y empezar a vivir – limpio y sobrio.