Daño a los niños no natos y al bebé

Feto bebe

Cuando la cocaína es abusada por una mujer embarazada, la droga pasa a través de la placenta y afecta al bebé también. La exposición del feto a esta droga puede resultar en un daño considerable.

Para comenzar, el efecto estimulante de la cocaína no sólo provoca una mayor presión arterial y la frecuencia cardíaca rápida en la madre, sino también en el bebé. Ecografías de bebés no nacidos han demostrado estos efectos mientras que la droga estaba activa. Los fetos expuestos a la cocaína se movían en exceso, no dormían en los patrones normales, succionaban de forma continua y mostraron otros cambios. También manifestaron síntomas de abstinencia si la madre dejó de usar la droga antes de que naciera el bebé.

La muerte fetal es un resultado posible debido a la separación de la placenta del útero causado por el consumo de cocaína.

Signos después del nacimiento

Si la madre es adicta a la cocaína cuando nace el bebé, el bebé probablemente a mostrará signos de abstinencia. Puede tener temblores, espasmos musculares, insomnio y dificultad para alimentarse.

Los bebés nacidos de madres que con frecuencia abusan de la cocaína durante el embarazo a veces tienen cabezas más pequeñas y pueden ser más pequeños en forma general. Los cerebros pueden ser más pequeños al nacer y permanecer más pequeños de lo habitual a partir de entonces.

Infante

Un bebé expuesto puede nacer antes de tiempo y se puede retrasar su crecimiento después del nacimiento. También hay un mayor riesgo de muerte súbita del lactante.

Los defectos de nacimiento son más comunes entre los bebés expuestos a la cocaína. Los defectos de los genitales, del corazón, de los riñones, del cerebro, de los brazos o de las piernas y de los intestinos no son infrecuentes. Algunos bebés nacen con una mano o un pie como “garra de langosta”, técnicamente denominado ectrodactilia. (Esto también puede ser resultado de un defecto genético.)

En varios casos, los bebés han sufrido accidentes cerebrovasculares cuando la madre tenía cocaína en su sistema antes o durante el parto.

El daño a los bebés y a niños inocentes es tan grave que cualquier mujer en edad fértil debe evitar el contacto con la cocaína. Si descubre que está embarazada mientras la esta usando o esta adicta a la cocaína, debe buscar ayuda médica para recuperarse inmediatamente para así preservar a la salud e incluso la vida del niño.

Referencias: