Una historia presentada en el 2010 en la cadena ABC News mostró la forma típica de cómo el abuso de inhalantes se puede descubrir en una familia. Riley Foster, de Indianapolis, Indiana, reveló que él primero comenzó a jugar con los inhalantes cuando tenía doce años de edad. Él perdió el conocimiento en esa primera vez, pero pronto le llegó a gustar. Comenzó a abusar de más inhalantes con más frecuencia.
Al final, estaba inhalando gasolina durante horas mientras escondido en el garaje, después de la escuela. Se volvió distante y retirado, pero sus padres no sabían por qué. Su madre dijo que no pasaba tanto tiempo con la familia, dormía más, discutía mas con miembros de la familia y se irritaba con facilidad.
Finalmente, su madre lo encontró desmayado después de una sobredosis de gasolina. Cuando volvió en sí, dijo que se tambaleaba, hablaba arrastrando las palabras y su madre temió que fuera a morir.
En el sitio web www.drugfreeworld.org, hay una cita de una madre que dijo: “Mañana es el sexto aniversario de la muerte de nuestro hijo Justin. Él tenía dieciséis años. Murió a causa de la inhalación de ambientador, una forma de abuso de inhalantes. Su muerte sin sentido sacudió el mundo de todos los que le conocían. Justin era un estudiante de honor que amaba la vida y la vivía con entusiasmo. Siempre estaré obsesionada con la idea de preguntarle a Justin, si estuviera con nosotros hoy, si el sabía acerca de los riesgos que estaba tomando.”
Lo mejor que puede hacer es asegurarse de que su hijo entienda los riesgos antes de que la emoción momentánea de abusar de inhalantes pueda opacar su buen consejo.