Como en cualquier programa de rehabilitación de drogas, los resultados individuales pueden variar.
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“Un Mundo Completamente Nuevo”
Graduado de Narconon
Tiffany B.
No estaba trabajando. Estaba viviendo con un novio que se drogaba, y yo pasaba cada día consiguiendo drogas. Sin embargo, había alguien para quien trabajaba a quien le robé dinero de la paga para conseguirlas. En aquel entonces pensaba que era racional. Y no podía parar, hasta que toqué fondo completamente. No tenía propósito. Sentía como si yo sólo existía en el tiempo y que no iba a ningún sitio y que me quedaría así para siempre.
Afortunadamente, mi abuela me dijo cuando fui de vacaciones: “No pongamos otro parche y hagamos una de estas rehabilitaciones de 28 días. ¿Qué te parece este lugar?”. Y dije: “Bien, iré”.
Cuando terminé el programa del sauna, me sentí como de 16 años. Podía concentrarme mejor. Podía centrar mi atención mejor. Me desperté de verdad.
También aprendí que yo era una persona moral y éticamente buena, y que tenía buenos principios morales. Y aprendí acerca de las diferentes áreas de mi vida y dónde se encuentra mi ética en esas áreas, y en qué condición estaban esas áreas de mi vida, tales como el trabajo o la familia, y ya sabes, lo que quiero hacer para mejorarlas para ponerlas en una mejor condición.
Narconon me dio una nueva vida. O se podría decir, un comienzo nuevo, y todo un nuevo mundo de oportunidades. Que ni siquiera sabía que tenía cuando no tomaba drogas. Antes de meterme en drogas, no tenía las oportunidades que tengo ahora, por hacer este programa.