NUESTRA SOCIEDAD BIOQUÍMICA

por L. Ronald Hubbard

Vivimos en una sociedad que está orientada químicamente.

Sería difícil encontrar a alguien en la civilización actual a quien no le afecte este hecho. Cada día, la gran mayoría del público está sujeto a ingerir conservantes de alimentos y otros venenos químicos, incluyendo inhalar venenos atmosféricos y pesticidas. Además, están los analgésicos, los tranquilizantes, las drogas psiquiátricas y otros fármacos que recetan los médicos. Asimismo, el uso generalizado de marihuana, LSD, cocaína y otras drogas callejeras contribuye en gran medida a este escenario.

Estos factores son parte del problema bioquímico.

BIOQUÍMICO se refiere a la interacción entre los seres vivos y las sustancias químicas.

BIO- significa vida; relacionado con seres vivos; del griego bios, vida o forma de vida.

QUÍMICO significa que pertenece o está relacionado con sustancias químicas. Los químicos son sustancias simples o complejas, que son los componentes básicos de la materia.

El cuerpo humano está hecho de ciertas sustancias químicas y compuestos químicos exactos, y en su interior continuamente tienen lugar procesos químicos complejos. Algunas sustancias, como los nutrientes, el aire y el agua, son vitales para que estos procesos continúen y para mantener la salud del cuerpo. Otras sustancias son relativamente neutras cuando se introducen en el cuerpo, y no causan ni daño ni beneficio. Y otras sustancias pueden causar estragos, impidiendo o alterando funciones vitales corporales, enfermando al cuerpo o incluso matándolo.

Las SUSTANCIAS TÓXICAS, que encajan en esta última categoría, son aquellas que trastornan el equilibrio químico normal del cuerpo o interfieren en sus procesos. La expresión “sustancia tóxica” se usa para describir a las drogas, a las sustancias químicas o a cualquier sustancia que demuestre ser venenosa o dañina para un organismo. La palabra tóxico viene de la palabra griega toxikon, que originalmente se refería a un veneno en el que se sumergían las flechas.

DESINTOXICACIÓN sería la acción de eliminar un veneno o un efecto venenoso de algo, tal como de nuestro propio cuerpo.

SUSTANCIAS TÓXICAS EN ABUNDANCIA

Se ha escrito una gran cantidad de material sobre el tema de las sustancias tóxicas, los efectos que se han reportado que causan y sus posibles tratamientos. Abundan los ejemplos en las publicaciones y las noticias.

El entorno actual está saturado de estos elementos hostiles a la vida. Las drogas, residuos radiactivos, contaminantes y agentes químicos de todo tipo no sólo están en todas partes, sino que se generalizan más y más a medida que pasa el tiempo. De hecho, son tan comunes que es casi imposible evitarlos.

Por ejemplo, algunas de las sustancias que se ponen en los vegetales o sopas en conserva podrían considerarse tóxicas. Son conservantes y la acción de un conservante es impedir la descomposición. Sin embargo, la digestión y la acción celular se basan en la descomposición. En otras palabras, estas sustancias pueden ser una maravilla para el fabricante, ya que conservan su producto, pero podrían ser muy malas para el consumidor. No es que yo esté siguiendo una moda con respecto a la alimentación o esté en contra de los conservantes. El hecho es que el Hombre está rodeado de sustancias tóxicas.

Este ejemplo por sí mismo de los conservantes en los alimentos muestra el grado en que encontramos sustancias tóxicas en el curso del vivir cotidiano.

Pero combinemos eso con el hecho de que los enemigos de diversos países están usando la drogadicción generalizada como un mecanismo derrotista y con que hay naciones rivalizándose entre sí en la fabricación y prueba de armas nucleares (y así aumenta la cantidad de material radiactivo que queda libre en el medio ambiente). Luego agreguemos lo fácil que es conseguir analgésicos y sedantes, el incremento en el uso de sustancias químicas en la industria y en la agricultura, y las sustancias tóxicas que se desarrollan para servir como armas químicas. En resumen (y dicho sin rodeos), en este momento esta sociedad está plagada de sustancias tóxicas.

Señalar con brevedad ciertos datos relacionados con esas sustancias que presentan una amenaza para los individuos y la sociedad en general, hará más clara y visible la situación bioquímica. El Programa de Purificación está diseñado para tratar con esta situación.

LAS DROGAS

Las drogas son esencialmente venenos. La cantidad que se toma determina el efecto. Una cantidad pequeña actúa como estimulante (incrementa la actividad). Una cantidad mayor actúa como sedante (impide la actividad). Una cantidad aún mayor actúa como veneno y puede matar a la persona.

Esto es verdad sobre cualquier droga y para cada una existen cantidades diferentes con las cuales producen esos efectos. La cafeína es una droga, así que el café es un ejemplo. Cien tazas de café probablemente matarían a una persona. Diez tazas probablemente harían que se durmiera. Dos o tres tazas estimulan. Esta es una droga muy común. No es muy dañina, ya que se necesita una cantidad muy grande para causar un efecto. Así que se le conoce como estimulante.

Se sabe que el arsénico es un veneno. Sin embargo una cantidad muy pequeña funciona como estimulante, una dosis mayor hace que la persona se quede dormida y unos cuantos granos la matan.

DROGAS CALLEJERAS

El escenario de las drogas abarca a todo el planeta y está bañado en sangre y miseria humana.

La investigación ha demostrado que el elemento más destructivo presente en nuestra cultura actual son las drogas.

La investigación incluso ha establecido que hay tal cosa como una “personalidad de drogas”. Es artificial y las drogas la crean.

La aceleración del consumo generalizado de drogas como el LSD, la heroína, la cocaína, la marihuana y la lista larga de drogas callejeras nuevas han contribuido todas a nuestra sociedad debilitada. Incluso a los niños en edad escolar se les fuerza a tomar drogas. Y los niños nacidos de madres que toman drogas, nacen drogadictos.

Según informes, algunas de estas drogas pueden causar daños cerebrales y nerviosos. Por ejemplo, existen informes de que la marihuana, que tiene tanta aceptación entre los estudiantes universitarios, quienes se supone que deben llegar a ser inteligentes para poder ser los ejecutivos del mañana, puede causar atrofia cerebral.

La investigación incluso ha establecido que hay tal cosa como una “personalidad de drogas”. Es artificial y las drogas la crean. Aparentemente, las drogas pueden cambiar la actitud de una persona, haciendo que su personalidad original llegue a ser una personalidad que secretamente abriga hostilidades y odios que ella no permite que afloren. Aunque esto puede que no sea cierto en todos los casos, sí establece una conexión entre las drogas y el aumento de dificultades con el crimen, la falta de productividad y la desintegración moderna de la cultura social e industrial.

Los devastadores efectos fisiológicos de las drogas ocupan comúnmente los titulares de los periódicos. Es muy obvio que también provocan la reducción de la agudeza mental y del carácter ético.

Pero por perversas y nocivas que sean las drogas callejeras en realidad son sólo una parte del problema bioquímico.

DROGAS MÉDICAS Y PSIQUIÁTRICAS

Las drogas médicas y en particular la larga lista de drogas psiquiátricas (Ritalin, Valium, Thorazine y litio, por nombrar algunas) pueden ser tan dañinas como las drogas de la calle. La presencia generalizada de estas drogas de uso común en la actualidad sería muy sorprendente para alguien que no estuviera familiarizado con el problema.

A menudo se administran sedantes como si fueran una panacea para todo mal. Para 1951, muchas personas se habían acostumbrado tanto a su dosis diaria de píldoras para dormir o de analgésicos que no consideraban que sus “pildoritas” fueran drogas.

Con demasiada frecuencia, la actitud es “si no puedo encontrar la causa del dolor, al menos lo volveré insensible”. En el caso de alguien que padece una enfermedad mental, esto podría interpretarse de esta manera: “Si no se le puede volver racional, por lo menos se le puede tranquilizar”.

Por desgracia, no se reconoce que una persona cuyo dolor se ha vuelto insensible con un sedante, haya sido insensibilizada ella misma con la droga y se encuentra mucho más cerca del más extremo dolor de la muerte. Debería resultar obvio que las personas más tranquilas del mundo son los muertos.

El alcohol es una droga. El grado de consumo de alcohol (la cantidad y la frecuencia) determina si se puede considerar que un individuo toma demasiado.

EL ALCOHOL

El alcohol no es una droga psicotrópica, pero es una droga que altera los aspectos bioquímicos. El alcohol no le hace nada a la mente; le hace algo a los nervios. Como absorbe con rapidez toda la vitamina B1 que hay en el cuerpo, hace que los nervios no puedan funcionar en forma adecuada.

Por lo tanto, la persona no puede coordinar su cuerpo. En pequeñas cantidades, el alcohol es un estimulante y en grandes cantidades es sedante.

La definición de alcohólico es alguien que no puede tomar sólo un trago. Si toman un trago, tienen que tomar otro. Son adictos. Uno de los factores es que deben tener un vaso lleno frente a ellos. Si se vacía, hay que volverlo a llenar.

Los alcohólicos se encuentran en un estado de hostilidad total e implacable hacia todo lo que les rodea. Arruinarán a la gente sin previo aviso.

El alcohol es una droga. El grado de consumo de alcohol (la cantidad y la frecuencia) determina si se puede considerar que un individuo toma demasiado.

PROCESOS Y PRODUCTOS COMERCIALES

En los últimos años, se han realizado muchas investigaciones sobre los efectos tóxicos potenciales de muchas de las sustancias que, por lo común, se usan en varios procesos y productos comerciales, y sobre el grado en que pueden llegar al interior de los cuerpos de los habitantes de este planeta. A continuación se presentan algunos ejemplos de los resultados que esta investigación está dando a conocer.

LOS QUÍMICOS INDUSTRIALES

En este apartado hay decenas de miles de sustancias químicas que se usan en la industria. No todos esos productos químicos son tóxicos, por supuesto. Pero los trabajadores de las fábricas que producen o usan productos como pesticidas, derivados del petróleo, plásticos, detergentes y productos químicos para la limpieza, solventes, metales chapados, conservantes, medicamentos, productos de amianto, fertilizantes, algunos cosméticos, perfumes, pinturas, tintes, aparatos eléctricos o cualquier material radiactivo, pueden estar expuestos a materiales tóxicos, a menudo durante largos períodos. Los consumidores, por supuesto, pueden exponerse a cantidades residuales de estas sustancias químicas al utilizar los productos.

QUÍMICOS EN LA AGRICULTURA

Los pesticidas son las sustancias tóxicas más obvias a que pueden estar expuestos los que trabajan en actividades agrícolas. Incluyen insecticidas (sustancias químicas que matan insectos), herbicidas (sustancias químicas para matar plantas indeseadas, como las malas hierbas) y fertilizantes artificiales.

Entre los herbicidas hay algunos que contienen una sustancia conocida como “dioxina”, que se sabe es un producto químico altamente tóxico, incluso en cantidades casi tan pequeñas para ser detectadas en el cuerpo.

El contacto con sustancias químicas que se usan en la agricultura puede ocurrir en diversas formas. La sustancia puede estar sobre la planta o en su interior y por lo tanto ser comida. El viento puede transportarla y quienes viven o trabajan en zonas agrícolas pueden respirarla. Incluso puede introducirse en los suministros de agua potable.

LOS ALIMENTOS, SUS ADITIVOS Y LOS CONSERVANTES

Hay sustancias que se añaden a algunos alimentos procesados para el comercio, que se supone “potencian” su color, su sabor o, como se mencionó antes, impiden que el alimento se eche a perder. También hay varios edulcorantes artificiales que se están haciendo más comunes, que se usan en los refrescos de “dieta” y otros alimentos envasados a nivel comercial. A partir de las investigaciones relacionadas con estos “potenciadores”, “edulcorantes” y “conservantes”, parece que muchos de ellos son bastante tóxicos. Todo el tema de los aditivos y conservantes de alimentos se ha convertido en un tema preocupante para muchas personas.

Existe otro aspecto en este asunto de los alimentos. Los descubrimientos de investigaciones señalan la posibilidad de que los aceites rancios sean un peligro para la salud de una magnitud que nunca antes se sospechó. Los investigadores han relacionado los aceites que se usan al cocinar alimentos o procesarlos para su comercialización, cuando no son frescos, puros y libres de ranciedad, con enfermedades digestivas y musculares e incluso con el cáncer.

LOS PERFUMES Y FRAGANCIAS

El uso de perfumes y fragancias en todo tipo de productos se ha generalizado cada vez más en los últimos años. A todo se le agregan fragancias, desde los detergentes para lavar a máquina y a mano hasta los pañuelos desechables y los anuncios en las revistas. Y esa fragancia es casi siempre un derivado químico barato, un extracto de alquitrán de hulla cuyo costo es probablemente unos 10 centavos de dólar por un barril de 200 litros. Los hallazgos parecen confirmar que estas sustancias químicas que flotan libremente en el supermercado local en forma de “fragancias”, de hecho son tóxicas y pueden acabar dentro de los productos alimenticios que se venden allí. Es obvio que ingerir estas sustancias químicas no ayuda a la digestión.

LA RADIACIÓN

Sin duda has leído en los periódicos que el contacto con la radiación puede ocurrir al exponerse a pruebas de armas nucleares (o a las partículas radiactivas que estas pruebas pueden liberar en la atmósfera), a residuos nucleares o a algunos procesos de fabricación que utilizan materiales radiactivos. Además, el uso creciente de la energía atómica para el suministro de electricidad (sin desarrollar a la vez una tecnología apropiada y medios para utilizarla con seguridad) presenta una amenaza que no es militar. Y el deterioro de la atmósfera superior del planeta a causa de los contaminantes, permite que año tras año penetre más radiación solar hasta la superficie del planeta.

En otras palabras, hay muchas maneras en que uno puede estar expuesto a la radiación. Está por toda la atmósfera y siempre lo ha estado. Simplemente ahora hay más.

Los que adoran al Sol, los que se dan baños de sol, los que se especializan en asarse bajo el sol año tras año, se exponen a la radiación. ¿Qué es el Sol, sino una esfera de radiación? No es posible encontrar en ninguna parte un mejor ejemplo de radiación que nuestro propio Sol. Por lo tanto, una quemadura de sol es una quemadura, pero no una quemadura que se produce simplemente por exceso de calor: es una quemadura por radiación. Es probable que cierta cantidad de luz solar sea esencial para la buena salud del cuerpo humano. Aquí estamos hablando de exponerse en exceso. Aunque uno no llegue a quemarse, estrictamente hablando, al exponerse mucho al Sol todos los días durante largos periodos, está sujeto a los efectos acumulativos de la radiación.

Los rayos X también nos exponen a la radiación. Son absolutamente tan mortales como la fisión atómica. Los rayos X no producen una gran explosión; no te impacta una explosión tremenda que podría acabar con una ciudad. Pero después de placa, tras placa, tras placa de rayos X, sí produce en el individuo niveles altos de radiación, de manera que podría enfermarse si recibe un poco más de rayos X o lluvia radiactiva. La aplicación, repetida y continua de rayos X a una persona puede producir todo lo que produce la fisión atómica al contaminar la atmósfera.

Cuando hay una atmósfera radiactiva, también se reduce el índice de la salud. Cuanto más se exponga una persona a la radiación, menos resistente será y la radiación tendrá mayor efecto en ella. En otras palabras, con el paso del tiempo ocurre una acumulación en el cuerpo, debido a cualquiera de las fuentes de radiación descritas anteriormente. Como la radiación es acumulativa, es obvio entonces que esto complica el problema bioquímico y representa una gran barrera.

UNA RESPUESTA AL MUNDO BIOQUÍMICO

Tomando en cuenta lo anterior, el Programa de Purificación es una respuesta que se brinda a este problema bioquímico. En una sociedad tan impregnada de drogas y materiales tóxicos, como esta ha llegado a estarlo, resolver las acumulaciones de estos materiales debería ser un punto de gran interés.

Las preguntas lógicas sobre cualquier procedimiento que pudiera resolver tales acumulaciones sería: “¿Funciona?”. “¿Tiene resultados?”

Estas preguntas pueden responderse mediante la experiencia práctica y mediante una comprensión de los descubrimientos básicos que tuvieron como resultado un procedimiento que libera al individuo de los efectos dañinos de las sustancias tóxicas.